Huésped de paso
deja en la casa el canto
tu huella en las arenas.
Iván Carvajal
Para Sandro Luna,
en la amistad desheredada
Huésped del tiempo,
erigirá su templo
en la frágil arena
de su cuerpo.
Huésped del viento,
consumirá su aliento
desplazando la esfera
de su centro.
Huésped del hueco,
arruinará el momento
limitando con piedras
el desierto.
Huésped del sueño,
adorará el reflejo,
compartiendo su ofrenda
con los muertos.
Huésped del hueso...
consúmete en el fuego,
encuéntrate en la tierra
del silencio.
Huésped del silencio quizás, o de la búsqueda.
ResponderEliminarProfunda poesía. Necesaria.
Alicia
la palabra "huésped" me resultó siempre tan contradictoria... el que llega a quedarse y el que lo acoge... ¿ahora cómo entiendo el poema?
ResponderEliminarHuesped y silencio...hombre.
ResponderEliminarPara releer con calma es profundo y sabio.
Un abrazo Rodri
Plasmado de sabiduría y, sumamente profundo.
ResponderEliminarPrecioso, eso somos al fin y al cabo huespedes. Me ha gustado mucho, pasaré por tu casa para seguir leyéndote.
ResponderEliminarUn beso astral
chupócteros, parásitos, eso somos, de todo aquello que vamos consiguiendo en la vida, aquello que ansiamos y logramos es lo mismo que nos va quitando la libertad.
ResponderEliminarEn mi humilde opinión.
Un saludo,
Estupendo. Mis felicitaciones,
ResponderEliminarrafarrojas